lunes, octubre 08, 2012
La operación de Santos
Existen muchos signos evidentes que marcan el progreso de Colombia. No vamos a ser tan tontos de creer que hemos retrocedido en calidad de vida. De acuerdo con los estándares occidentales reconocidos hay datos suficientes para demostrar los avances logrados en los últimos sesenta años.
Pero es obvio que no tiene mayor sentido, diferente al histórico, comparar nuestra calidad de vida con la del siglo XIX o con los primeros años del siglo anterior. Lo que cuenta es el proceso de mejora y la comparación con países más desarrollados.
Excelente que gracias al sistema de salud la cobertura haya aumentado notablemente. Pero lo es menos cuando se entra en los detalles y se analiza el sector con más detenimiento.
Me sentiría realmente orgulloso de mi país si me pudiesen demostrar que un ciudadano común afiliado a una EPS se demora unos pocos días más que el presidente de la república en lograr una cirugía de su próstata. Me dirán, pero es el presidente y yo contestaré pero el otro es un ciudadano y paga en el sistema contributivo.
De otra parte hay que observar el tratamiento que la entidad estatal que manejaba las pensiones les dispensa a las personas que presentan su documentación para acceder a su pensión de vejez. Demoras y dilaciones. Y el trato que está dando la nueva Colpensiones es igual o peor.
¿Por qué los fondos privados de pensiones son capaces de actuar en poco tiempo y el estado no? ¿No será bueno pensar que el sistema de prima media debe desaparecer? ¿Y que el estado en este y en otros temas debe premiar la eficiencia en la prestación de los servicios esenciales a los ciudadanos?
Los hospitales públicos a muchos de los cuales les cambiaron sus nombre fueron aparentemente saneados en sus finanzas hace un poco menos de diez años. Y varios de ellos ya están nuevamente en crisis. Quizás no sean administrados con la eficiencia que se requiere, pero el problema es otro. El modelo de salud está fallando y debe corregirse. Las EPS demoran sus pagos.
En los últimos tiempos se han hecho reformas desde una perspectiva filosófica en boga que buscaba fortalecer y reforzar el papel del empresario prestador de los servicios de salud. Poco desde la perspectiva del paciente, del usuario al que se demoran en atender. Unos plazos para citas con especialistas y se nota que fue concertado con las EPS para no perturbarlas demasiado.
El empresario que decide asumir una prestación de salud a través de la figura jurídica de las EPS debe acreditar y refrendar unos requisitos iguales y superiores a los que se exigen a los bancos. Y la superintendencia que los vigila debe tener el equipo y las herramientas que intimiden a los indisciplinados.
Necesitamos un serio ajuste en nuestro sistema de salud y pensiones para mejorar la calidad del servicio a la gente y aprovechar mejor el dinero. Lo alcanzado es bueno pero hay que mejorarlo.
sábado, septiembre 29, 2012
De regreso!
He dejado pasar algo más de dos años sin escribir en este blog.
Mientras tanto intenté escribir en el twitter porque me apasionaba redactar una idea en ciento cuarenta caracteres o menos.
Pero creo que es hora de volver a mi viejo y olvidado blog.
Han pasado muchas cosas y muchos de los cambios realizados en este período aún no son advertidos y valorados por nosotros.
Ojalá tenga el talento y la disciplina para expresarme con alguna originalidad y aportar algo.
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